Jorge Patricio Tenesaca Andrango
La vida de Jorge Tenesaca transcurrió entre el amor a su familia y el trabajo al servicio de la ciudadanía de Quito. Sus amigos lo recuerdan como una persona alegre, carismática y comprensiva. De cariño le llamaban ‘El Tene’. Sus momentos más felices los compartió junto a su esposa e hijos. Con ellos iba de paseo y guardaba en fotografías los momentos más valiosos. Se desempeñó como trabajador de la Empresa Metropolitana de Aseo (Emaseo), de Quito. Ahí se encargaba de la recolección de basura en Quito, y pertenecía al grupo Soldados Azules. Yolanda Gaete, gerente de esta institución municipal, recuerda que él fue parte de las 1 100 personas que están operativos actualmente, entre conductores, recolectores, barredores y gente de supervisión, al servicio de los habitantes de la capital. “Era un obrero de recolección de carga lateral, en el turno de la madrugada, de 3:00 a 11:00”, detalla. Junto a sus compañeros, Jorge se encargó de mantener limpia la ciudad durante la cuarentena, para evitar que el virus se propague. Y así, con ese esfuerzo silencioso, se puso en la primera línea al momento de luchar contra la pandemia. La empresa reconoció que Jorge fue un “joven sano y trabajador”. Una persona que vivió en favor de sus semejantes.