Jorge Marco Hurel Prieto
Doctor en Medicina y Cirugía, Máster en Gerencia de Servicios de Salud. Jorge Marco Hurel Prieto era el Director Técnico encargado del Hospital Luis Vernaza, de Guayaquil. Sus pacientes y colegas lo recuerdan como “un apóstol del amor y del servicio al prójimo”, por su carácter dulce. Era un hombre prudente y de palabras amables, con un espíritu valiente. Así lo dibujan los recuerdos de David Martínez: “El doctor Hurel estaba excusado de asistir por ser vulnerable, pero se mantuvo en el hospital, trabajando. Cuando enfermó vino solo a que lo atiendan. En silencio, sonriente y empático”. Su padre, el doctor Jorge Hurel Cepeda, le enseñó francés con textos de medicina en ese idioma. De él heredó el humor, el honor y la pasión por la medicina, cuenta su sobrina, Fabiola Hurel. Tenía por costumbre tomar el pulso, la presión y la temperatura en sus habituales recorridos. Siempre tenía tiempo y paciencia para elaborar una historia clínica, tal como lo hace un médico familiar. Su espíritu era el de médico residente, de un ‘ratón de hospital’, como le gustaba referirse a sí mismo. El doctor Hurel murió tres meses antes de cumplir los 75 años. “Hoy, la sala no será visitada por él y, sin embargo, en medio del silencio y la ausencia, puedo todavía verlo inclinar su cabeza cana y despedirse con gesto risueño”, escribió David.